¿Dónde está el gato?

¿Te gustan los gatos? A mi me encantan. Yo tengo uno, muy pequeñito. Lee esta pequeña historia sobre mi gatito y repasa, además, la diferencia entre los verbos SER y ESTAR.

Parece fácil, ¿no? pero quizás no es tan fácil como parece…

¿Quieres seguir practicando?

Si quieres seguir practicando la diferencia entre ser y estar, puedes hacer también este juego:

JUEGO SER – ESTAR